El FMI pide que dejemos de respirar

¿Una broma? No creo. Al ritmo que va este organismo económico internacional, en su próximo informe sobre cómo salvar el mundo diciendo obviedades, pedirá al Gobierno de Mariano Rajoy que recorte el número de inhalaciones que hacen los ciudadanos y que consuman menos oxígeno. Todo sea por ahorrar.

Subir impuestos y bajar sueldos. Lo cierto es que los economistas que elaboran todos estos sesudos informes parece que estudiaron en España. Lo digo por el nivel universitario y todo eso.

“La economía se encuentra en medio de una recesión con recaída sin precedentes, con el desempleo en niveles ya inaceptables, la deuda pública en rápido crecimiento y necesidades de recapitalización en segmentos del sector financiero”.

Muy bien. Espero que para elaborar este par de líneas no hayan tenido que estar trabajando duramente varias semanas. Eso sí, la descripción es perfecta. Sobran los analistas y demás ruidosos charlatanes. Recesión, paro, deuda y sector financiero. Ahora bien, si la solución es seguir quitanto al que menos tiene, algo me dice que el problema seguirá enquistado mucho tiempo.

No obstante, esto sucede por una simple razón, España ha perdido por completo su soberanía nacional. Sí, la idea no es nueva, lo sé, pero como siempre veo a la gente tan ofuscada los viernes en las rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, conviene recordar que la política monetaria, esto es control del valor del dinero, está cedida a la Unión Europa, la política fiscal, ante los rescates/ayudas/préstamos, también la hemos cedido... Pues bien, simplemente falta la propia gobernanza política, y esa es la que amablemente está diciendo el FMI cómo tenemos que hacer.

Así pues, un Gobierno sin control, ni es gobierno ni es nada. Un títere que recibe los palos de una sociedad descontenta y que pese a intentar poner una sonrisa a la situación, cada vez se ve todo más complicado. Cada mañana es más difícil encontrar un motivo de alegría de cara al futuro, aunque como buenos pobres, habrá que seguir soñando.

La Unión Europea no existe

No adelanto nada nuevo, ni descubro el mundo. Claro, si fuese así, me ganaría la vida con este Blog. La cuestión es que por enésima vez un mandatario europeo ha pegado una patada en la entrepierna a los débiles cimientos de la falsa Unión Europea que tenemos montada.

En esta ocasión ha sido el pequeño Nicolas. Ni corto ni perezoso, el mandatario francés ha dicho que el grifo migratorio lo cortará. Cerrará las fronteras, controlará la inmigración...

Realmente, a nada que uno siga la actualidad con una chispa de atención, se puede dar cuenta de que varias cuestiones confluyen en el tiempo, por lo que no hay que preocuparse, al menos demasiado.

Elecciones, líder conservador, poco valorado, perdiendo posición siendo el actual presidente... No quiero exculpar a Nicolas Sarkozy, pero vaya, que es comprensible que su discurso giré en torno a Francia, lo francés y los franceses. No tiene sentido ni lógica, pero con este tipo de acciones queda bien claro que la Unión Europea es tan solo un mito de carácter económico que nunca debe estar por encima de los intereses nacionales.

En el instituto muestran a la UE como una entidad supranacional, ya, claro. No nos vengamos a engañar a estas alturas de la película. La Unión Europea no se sabe muy bien qué es. Me considero un ciudadano medio, informado y con un nivel académico y cultural que me hace ser una persona, más o menos, responsable hacia la sociedad. Pero vaya, que no entiendo qué leches es la Unión Europa, qué función tiene, por qué nadie la protege, y cuál será su futuro.

En definitiva, que nadie nos engañe. La Unión Europea no existe. Y si nos lo hacen creer es para ceder más derechos a más instituciones, así de simple.

Bin Laden, más responsable que 'Los Mercados'

(14 / sep / 2011) - ¿Hasta dónde vamos a llegar? Que cuatro años después de la quiebra de Lehman Brothers sigamos hablando de 'los Mercados' como un ente sin personalidad jurídica es absurdo. De hecho, parece que esos 'Mercados' son el "humo negro" de 'Perdidos'. Siempre al acecho, entre las sombras y dispuestos a llevarse por delante lo que haga falta. 

Cuando digo que Bin Laden era más responsable que los dichosos 'Mercados' es porque, al menos, el señor de la muerte talibán "luchaba por unas causas justas". Absurdo, maléfico e ilógico, sí. Un terrorista criminal, también. Pero creía en una serie de cosas. Mataba porque, desde su prisma y el de sus acompañamtes, hay una religión única, y las demás pervierten su esencia, aunque también hubiera implicaciones económicas en todo eso. 

Todo esto es atroz, pero como digo, tenía un fin concreto, el mal solo era un camino. Por el contrario, 'los Mercados' utilizan ese "mal" como medio, no como fin. Están destrozando familias enteras, empresas, sistemas económicos, ¡¡¡ países !!! Vale, no es lo mismo matar a 200 personas en un atentado, pero llevar a la quiebra técnica a un país de millones de personas, tampoco tiene mucha lógica. 

Lo que sigo sin comprender, por más vueltas que intento dar, es por qué no se busca y ajusticia a esos 'Mercados'; y que nadie me venda la milonga de que no se sabe quiénes son. Otra muy distinta es que siga habiendo intereses de los que mandan en que existan. Cuando EEUU quiso luchar contra el terror, enseguida sacó una baraja de cartas y puso nombre: Bin Laden, Al Zawiri, Al Moada, Al Bondiga... y así hasta una baraja entera. Se les buscó, se les encontró, y se les juzgo; bueno, se les mató, pero el caso es que para ellos valía. 

Fondos de inversión, entidades de riesgo... Mover la cantidad de dinero que se mueve no puede pasar inadvertido, y quienes controlan todo eso lo saben. Otra cuestión es la anteriormente citada: si yo soy ministro de finanzas del país 'x' y tengo, por ejemplo, una inversión de capital en cierta compañía, me interesa que siga creciendo y dando dividendos, por lo que no voy a perseguirla, creo que ese es el verdadero problema. 

Hasta entonces, por favor, que no sigan vendiendo la moto de 'los Mercados' como culpables de todo. Eso 'Mercados' son movidos por personas con nombre y apellido. Personas que hoy se habrán levantado, habrán tomado café y estarán a estas horas en su oficina pensando como "putear" a otro país para sacar rentabilidad en la compra de su deuda. Presionan, engañan, intimidan, juegan en Bolsa... Para mí son igual de terroristas que Bin Laden y sus amigos.

¿Seré insensible?

Ni Túnez, ni Egipto, ni Bahrein... ni tampoco ahora Libia. Nada, que no hay manera de que me interese lo que está pasando en estos países con sus revueltas que nadie conoce y no sabe interpretar, y que el típico grupo de alumbrados se encarga de decir que es algo histórico pero sin saber por qué.

No me interesa y, además, digo sin vergüenza que no sé que está pasando o ha pasado en ninguno de estos lugares. No soy de los que escribre en Twitter "Free Lybia" o chorradas sobre la Ley Sinde, no. Intento pronunciarme sobre lo que conozco.

Pese a ello, y por mi trabajo, debo estar al tanto de lo que este fulano maquiavélico llamado Gadafi esté haciendo. No obstante, y a riesgo de ser tildado de insensible, mi preocupación por lo que está sucediendo en Libia llega justo hasta el límite profesional para poder informar a la audiencia del medio en el que trabajo, nada más.

Son tantas las cuestiones que no entiendo que hacen que el rechazo sea inminente. Es decir, me asusta como persona y ser social que las víctimas se cuenten por miles, pero no quiero caer en la hipocresía de que ese asunto me preocupe más que los cinco millones de parados que hay en España, o el eterno problema de hambre que existe en el mundo. Y sí, puede ser una contradicción que me preocupe el hambre en el mundo y lo que está sucediendo en el norte de África no, pero es que se me escapan tantas cosas de las entendederas que no sé cómo posicionarme.

En definitiva, pese a mi preocupante falta de sensibilidad por lo que pasa en Libia, no quiero dejar de enviar un mensaje de cariño al pueblo libio y todas las personas que el mundo sufren bajo regímenes tiránicos o dictatoriales.

Esperando a que se hundan

Estar tratando con la información económica todos los días hace que uno magnifique las situaciones (vaya, que de Gran Hermano me ha quedado). Pero es cierto. En estos momentos hay asuntos como el dichoso conflicto del Sahara o la absurda camapaña electoral para las elecciones catalanas, a las cuales apenas puedo prestar atención.

Por el contrario, asuntos como la guerra cruzada entre bancos y cajas, o la apetencia de todo el mundo de que la economía irlandesa se desplome, son mis desayunos diarios.

Pero hoy quiero incidir sobre este último tema y el tratamiento que la prensa le está dando. Seré breve, porque entre otras cosas tampoco me lee mucha gente, así que tampoco merece la pena matarse, que bastante lo hago durante mis horas remuneradas.

La cuestión, desde mi punto de vista, es que parece haber como una expectación bastante grande para que Irlanda y su sistema económico se desplomen. No sé muy bien si es porque todos somos anti galaicos, o por la incógnita de saber cómo será ese famoso "rescate" por parte de las autoridades económicas internacionales.

Claro, entiendo que desde España se mire con recelo, pues muchos apuntan a que después del "país verde" y Portugal, los siguientes seremos nosotros. Sinceramente me cuesta mucho creer que España esté en una situación tal que tengan que "rescatarnos". Pero bueno, nunca habíamos ganado nada jugando al fútbol, y de repente, EuroCopa y Mundial a la vez... aquí todo puede pasar.