Los que alguna vez en su vida hayan amado sabrán que ‘Her’ es una película de amor con todas las letras. Duro, real, agobiante, intenso, y finito. Sí, aunque no lo queramos asumir el amor tiene final, entre otras cosas porque una característica de lo que hemos denominado amor es que es mutable. Así, una vez que esa sensación de enamoramiento pasa por todas sus fases llega al final para reconvertirse en cariño, aprecio y respeto. Pero eso no lo descubrimos en ‘Her’, donde finalmente todo se acaba.
Sobre esta película, la principal pregunta es: ¿podrán los hombres y mujeres en un futuro enamorarse de las máquinas? Vaya por delante, que si la voz, como es en el caso de ‘Her’, la pone el inconmensurablemente animal bello que es Scarlett Johansson, mañana mismo le pido matrimonio a mi smartphone. Pero al margen de chascarrillos íntimos, a la pregunta sobre el enamoramiento, creo que todo es posible. La película lo plantea y además lo resuelve de una manera brillante.
Por lo que respecta a la película en sí, 5 nominaciones, y la sensación de que puede ganar todo, o irse completamente de vacío. Al igual que sucede con ’12 años de esclavitud’ es el típico largometraje que te ofrece la posibilidad de pensar, reflexionar y meditar mientras lo estás viendo. Hay tiempo de sobra para analizar lo que hace el personaje principal, si acierta, se equivoca, o si eso mismo nos podría pasar a nosotros.
Por cierto, hablando del personaje, Joaquin Phoenix, de este golpe se va sin la nominación, algo que no es del todo justo, ya que la película es él, y ‘Her’ es Joaquin Phoenix. De hecho, no tiene mucho sentido que ocupando el 90% del metraje como único actor en la pantalla, y además haciéndolo bien con diversidad de registros, no haya optado al merecido premio de la simple nominación. Habrá que entender que sus motivos han tenido.
De vuelta a ‘Her’, y sus opciones como Película y Guion, las tiene, aunque ni mucho menos parte como favorita. La película, en esa idéntica mimesis de ’12 años de esclavitud’, muestra la patita pero al final no abre la puerta. Reflexiones sobre una sociedad tecnológica hasta el extremo, la soledad, el amor, los sentimientos no correspondidos, la verdad sobre hombre y mujeres en sus relaciones, la falsa importancia de la apariencia física… 120 minutos de constantes ideas que según avanza la película vas entendiendo que se ponen sobre la mesa pero que se van a recoger tal cual.
Por eso mismo, mi (7/10) en Filmaffinity lo explico por ese motivo, igual que en ’12 años de esclavitud’, porque no dan el golpe de timón definitivo. Le dejan al espectador que diseccione lo que piensa el protagonista, lo que le puede suceder si toma una u otra decisión, pero no va más allá, no hay tiempo.
(Sinopsis) En un futuro cercano, Theodore, un escritor solitario, consigue un nuevo sistema operativo basado en el modelo de Inteligencia Artificial y diseñado para satisfacer todas las necesidades del usuario. Para sorpresa de Theodore, se crea una relación romántica entre él y la voz femenina de este sistema operativo.
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