Woody Allen es un clásico de los Oscars, y pese a que en la última década tan solo ha ganado la estatutilla con ‘Midnigth in Paris’ en el año 2012, apenas un par de ediciones después vuelve a estar situado en la parrilla de salida para alzarse con un nuevo galardón, en este caso con el Mejor Guion Original.
Hasta aquí podría llegar todo lo que tengo que contar de ‘Blue Jasmine’, una película que no puedo valorar objetivamente porque simplemente no me gustó. Como claro ejemplo mi (4/10) en Filmaffinity. Por lo tanto, todo lo que pueda hablar sobre ella carece de un valor crítico real. Simplemente es el peor Woody Allen que he visto nunca, al menos el que siempre he estado acostumbrado a ver. Personalmente no sé dónde encajar la película. Es decir, su base es el drama, pero como siempre, el director neoyorkino le infunde esas claves de humor, que si bien es cierto, en esta película son bastante escasas.
Sobre la cinta en sí, y tomando esa “clave Allen”, creo que otorga a los personajes unos halos estereotípicos que se le va de la mano. Es decir, sus personajes siempre han sido muy ricos en matices y, como claro ejemplos, las paranoias y locuras en que son introducidos. Pero en esta ocasión y con Cate Blanchet a la cabeza, fuerza en exceso esa locura y borra la realidad del personaje.
Y en estas que entramos en la segunda nominación, precisamente la de Cate Blanchet, que si nadie lo remedia, es muy probable que se quede sin estatuilla. Su personaje es exagerado hasta decir basta, poco creíble, y eso siempre, en cierto modo, distancia al espectador de lo que está viendo. Suponemos que esa era el objetivo de Woody Allen en ‘Blue Jasmine’, pero sinceramente el efecto que logra es bastante contrario. Así pues, como decía al inicio sobre los gustos personales, la verdad es que la interpretación no me ha sido interesante, simplemente no me engancha.
Pero hablando de interpretaciones, la que sí me ha dejado un buen sabor de boca, y a buen seguro que será una de las favoritas es la de Sally Hawkins, nominada como actriz de reparto, aunque el cartel está muy duro, su interpretación hecha a base de realismo y sentimiento hundido en las esperanzas de un camino que no siempre parece el correcto, personalmente me alegraría bastante ver su cara en la noche de entrega.
Sobre la película tampoco puedo hablar mucho más, simplemente no me gustó. De hecho, me parece aburrida e ineficaz esa búsqueda de un amor “bueno”. Tan solo le salva esa música que nos recuerda a las mejores películas de Woody Allen, con sus diálogos, sus tramas, sus enredos… Sinceramente, no creo que rasque ningún Oscar, salvo ese papel secundario de Rally Hawkins, que por supuesto sería merecido. ‘Blue Jasmine’ es lo que es, una búsqueda dramática del amor que no acaba de llegar. Pero en medio se pierde en la locura de sus personajes.
(Sinopsis): Jasmine, una mujer rica y glamourosa de la alta sociedad neoyorquina, se encuentra de repente sin dinero y sin casa. Decide entonces mudarse a San Francisco a vivir con su hermana Ginger, una mujer de clase trabajadora que vive con su novio en un pequeño apartamento. Jasmine, que atraviesa el momento más crítico de su vida, se dedica a tomar antidepresivos y a recordar su antigua vida en Manhattan.
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Pues a mi me gustó bastante
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