A diestra y siniestra, así es como nos gusta repartir a los apátridos de la comunicación. O lo que es lo mismo, los periodistas que estamos en medios ultra pequeños y apenas tenemos visibilidad. Por lo tanto, nuestra voz, aunque a veces haya cosas importantes o interesantes que decir, y este no tiene por qué ser el caso, casi siempre pasa desapercibida.Pero bueno, después de este ataque incontrolado de falsa humildad, vamos a lo que hoy nos ocupa: la diestra. Si ayer fue el diario Público el que no sabía medir su compromiso con lo que representa, hoy le toca el turno a ABC. Del diario a cuya cabeza se encuentra Jesús Maraña se le puede perdonar. Son "jóvenes", llevan en esto relativo poco tiempo, y a veces hay que ganarse el favor de ciertos sectores de la sociedad. ¿Pero ABC? Más de cien años de historia para terminar así...
La portada de hoy no tiene desperdicio: "Ahora dice que tiene soluciones". ¿Qué clase de portada es esta?, ¿se puede ser más partidario y sectario?, ¿dónde ha quedado un mínimo de seriedad?
Lo cierto es que es una verdadera lástima. Como lector de prensa, cuando voy a un kiosko intento comprar el ejemplar que mejor me informe. Bien es cierto que busco unas firmas, un prestigio, una sección de Internacional potente, y claro está, una sección de Opinión que rearme mis argumentos, pero lo que hace ABC, ¿se encuadra dentro de esta línea?
Ojo, no digo que no lo hagan todos los demás, o incluso, ese medio ultra pequeño en el que yo trabajo. Pero dónde ha quedado esa función social de los medios de comunicación, al menos de los grandes, puesto que no todos jugamos en la misma liga.
Simplemente una lástima. Esa portada está fuera de lugar. No es informativa, únicamente es interpretativa, es más, es acusativa. Se denota un aire de desprecio hacia un cargo público bastante subido de tono. Parece que le dijese un macarra a otro: "ahora traes la litrona".
En definitiva, sigo con la eterna duda de saber si nos merecemos este tipo de prensa, o es la prensa la que no nos merece a nosotros.
