‘Boyhood’ del amanecer (atardecer o anochecer)

(20 / feb / 2015) - Para bien o para mal, ‘Boyhood’ no es una película, se trata de un apéndice más del director Richard Linklater en su obsesiva forma de retratar a cualquier hijo de vecino. Como digo, esto no es bueno ni malo, simplemente es Linklater, no hay otra manera de expresarlo, o al menos lo que a mí me transmite.

Llegué a ‘Boyhood’ con todos los prejuicios bien ordenados y listos para sacudir o aplaudir cuando los créditos iniciaran su marcha. Al final, nada, ni una cosa ni otra, silencio, reflexión. Dudando entre “lo ha vuelto a hacer” o “se ha quedado en el intento”. Constante hurgamiento en la memoria para retratar a sus amantes de Viena, París o Grecia, y acoplarlos en las andanzas de una familia norteamericana de clase media-rara que no tiene a favor ni los días con suerte. 

Intento ordenar mis ideas. No me aclaro. Es decir, la película me ha gustado, es Linklater, y si te gustó una vez te gustará más. Pero quizá el adorno metacineástico que rodeaba a ‘Boyhood’ se ha comido todo lo demás, incluyendo la propia película. Habrá quien piense que tiene 6 nominaciones a los Oscars por eso. Ni quito ni bendigo afirmaciones. 

Así pues, y centrando el asunto, Mejor película, Mejor director (Richard Linklater), Mejor actor de reparto (Ethan Hawke), Mejor actriz de reparto (Patricia Arquette), Mejor guión original (Richard Linklater) y Mejor montaje (Sandra Adair). Parece casi imposible que se vaya de vacío. El guión y montaje suenan a ‘Boyhood’, todo lo demás entra en el terreno académico del cual ni entiendo ni hablo.

No me parece la mejor película, pero a veces todo es muy subjetivo. En cuanto a otro de los “gordos”, el de Director, ¿por qué no? No sería nada descabellado, aunque la competencia es delicada. Sobre lo que tengo menos dudas es de Patricia Arquette y Ethan Hawke. Ambos me parecen potenciales clientes para subir a coger su parte del botín en esta película que no pasará a la historia, pero que la mayoría recordará. 

Quizá Celine y Jesse nos dejaron tan subordinados caminando por Europa que todo lo demás sabe a poco. Quizá el miedo a pensar en cosas distintas, a desvestir aquellas calles de Viena o París nos lleva a no conocer un Texas profundo que canta a su bandera. Es todo y es nada, no se puede ver ‘Boyhood’ sin pensar en nada más. O al menos esa suerte la han tenido quienes no se han cambiado de asiento en el tren alguna vez en su vida. 

(Sinopsis) Drama filmado a lo largo de 12 años (2002-2013) pero únicamente en 39 días de rodaje. Es la historia de Mason (Ellar Coltrane) desde los seis años y durante una década poblada de cambios: mudanzas y controversias, relaciones que se tambalean, bodas, diferentes colegios, primeros amores, también desilusiones, momentos maravillosos, de miedo y de una constante mezcla de desgarro y sorpresa. Un viaje íntimo y épico por la euforia de la niñez, los sísmicos cambios de una familia moderna y el paso del tiempo.

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