Lo poco gusta y lo mucho es absurdo

Para que mi enloquecida masa de seguidores no se preocupe por mi ausencia en este Blog, voy a cometer una pequeña infracción. Copiaré algo tal cual. Para mi descargo personal, diré que es mío (mi medio). Así pues, me autorizo a copiarme.

Se trata de una pequeña reflexión que he hecho sobre El Jueves y como ha confundido la libertad de prensa con creerse los más graciosos del cortijo.

Aquí va:

Primero fueron los Príncipes de Asturias, y ahora ha sido la Princesa del Pueblo, Belén Estaban, la que se ha visto exprimida al límite en el humor gráfico de ‘El Jueves’, aunque se les ha ido de las manos.

La más famosa de las tertulianas en programas del corazón, Belén Esteban, va a demandar a la revista semanal ‘El Jueves’ por las imágenes que aparecen en su último número. En él se puede ver a la ex mujer de Jesulín de Ubrique en actitudes poco decorosas mientras que se parodia su capacidad para hacerse cargo de un programa de TV.

Está claro que ‘El Jueves’, desde hace mucho tiempo, vamos, en realidad desde que es lo que es, se caracteriza por la sátira hacia todo tipo de personajes. Por ello, a lo largo de su historia se ha enfrentado a números embargados, retirados, y, evidentemente, toda clase de demandas. Y lo cierto es que en ocasiones se pasa de frenada como puede ser este caso.

Puede ser que Belén Esteban se haya convertido en el saco de arena sobre el que pegar golpes. En este caso, la persona sobre la que satirizar y gastar bromas de todo tipo, pero la insinuación que se hace sobre el consumo de drogas llega a excederse en toda regla. Realmente no se trata de un ramalazo de libertad de prensa, más bien es un ataque directo hacia una persona, y eso no tiene justificación.

Habrá quien justifique que estas burlas y chistes las tiene merecidas, pues es ella quien da juego para alimentar todas estas polémicas y las que vendrán. Pero no, en esta ocasión no hay motivo para ridiculizar a una persona. No lo había cuando se hizo con los Príncipes de Asturias, y no lo hay ahora con Belén Esteban.

‘El Jueves’ debe reconocer que se ha equivocado. Aunque claro está, estas cosas vienen bien para vender unos números más. Lo malo es que se hace a costa de la dignidad de integridad de las personas. Libertad de prensa sí, pero con cabeza.