Es decir, cuando hablo de imprescindible me refiero al hecho de que se trata de un entretenimiento 100% asegurado y que además, por qué no decirlo, para quienes no "piloten" mucho de política estadounidense puede venir bien.
Rápida, didactica -como ya he dicho-, entretenida, en ocasiones graciosa, interesante... podría estar así mucho rato, pero lo mejor es que cada cual la vea y opine. Yo me he permitido un pequeño capricho y me he comprado las siete temporadas completas. Una hermosa locura en forma de "pack" de coleccionista que volveré a deborar sin cansancio alguno.
Además, en estos tiempos corrosivos donde la clase política ha perdido el poco crédito del que gozaba, creo que una serie que mezcla la política, la comunicación y cómo se relacionan ambas cuestiones, merece la pena. Y teniendo en cuenta lo que hay en la televisión actual, ¿qué mejor manera de pasar el rato?
No hay comentarios:
Publicar un comentario